Durante la jornada de este domingo 3 de julio, 4 militantes de la agrupación Votamos Luchar fueron detenidos por las fuerzas policiales de Mar del Plata, por realizar un mural que conmemoraba a Maximiliano Kosteki y Darío Santillán, dos jóvenes asesinados por la policía en Avellaneda durante el año 2002.
En un operativo sumamente represivo y desmedido, que constó de 4 camionetas policiales, 3 motocicletas, y 15 policías, fueron detenidos Marcos Carboni, Manuel Cassanelli, David Diagne y Orlando Quispe. Los cuatro integrantes de Votamos Luchar, no se encontraban haciendo nada ilegal, simplemente participaban del rayado del mural, por lo que tanto la detención como la excesiva reacción policial fue considerada como totalmente gratuita por parte de los otros compañeros de la organización.
Los detenidos fueron llevados a la 16 Comisaría de dicha ciudad, donde permanecieron privados de libertad por un par de horas, cuando, producto de la presión de sus compañeros, un centenar de militantes que se manifestó a las afueras del recinto policial, los 4 militantes salieron en libertad.
Desde la organización se señaló lo siguiente, luego de la liberación de sus compañeros: “Con la lucha logramos la libertad de los compañeros. Con la presencia inmediata de compañeras y compañeros de diversas organizaciones que seguían llegando para sumarse frente a la comisaría al calor de las gomas y el piquete, y las llamadas y solidaridad desde distintos puntos del país, en menos de dos horas logramos que los cumpas ya estén en la calle para seguir la lucha. Contra el avance de la represión, unidad, lucha y organización!!”
Este hecho, si se mira en perspectiva, no es simplemente un hecho aislado de brutalidad y exceso policial, sino que muestra el signo represivo del gobierno de Macri, en donde desde distintas luchas y a lo largo de todo el país, se ha denunciado el excesivo carácter represivo de las fuerzas policiales.